Thelma es una de esas dulces sorpresas que aparecen de vez en cuando, y te dan un momento ameno, de mucha ternura y en donde hasta te pueden hacer pensar, por un segundo, que lo mejor que te puede pasar en la vida es envejecer. Thelma es una de esas películas que te va a dar un buen rato, te va a poner de buenas y te hará recomendarla a quien te encuentres unos días después de verla…y después, poco a poco, la irás olvidando.
La historia nos presenta a la abuela Thelma (June Squibb) que a pesar de que ya tiene más de 90 años, sigue siendo muy independiente y le gusta aprender de la tecnología. Un día, recibe una llamada de extorsión, pidiéndole dinero para sacar a su nieto Daniel (Fred Hachinger) de prisión. La abuela cae en la trampa y le da 10 mil dólares a los maleantes. La aventura inicia cuando Thelma decide ir a buscar a quienes la estafaron y recuperar su dinero.
Y como decía, es una aventura muy tierna, con un profundo mensaje del amor en familia, pero también de las grandes amistades, de como el tiempo te va dando lecciones muy complicadas en el camino, pero poner la mejor cara y la mejor actitud es siempre clave para disfrutar de la mejor forma el camino. Y sí, es una bonita lección y una película muy emotiva, pero al terminar de verla, me hizo sentir que fue todo, que no trascenderá más allá y pronto podría condenarse a ser olvidable.
La actuación de June Squibb es la que sí es memorable, es dulce, pero a la vez fuerte, como una abuela dispuesta a demostrarle a su familia y amigos que puede seguir viviendo de manera independiente y que la edad no es un sinónimo de ser vigilada todo el tiempo. Carga con el ritmo de la película y gracias a sus momentos serios y los no tan serios, nos guía en esta película que se siente como una bonita lección que nos va dejando un lindo mensaje todo el tiempo.
Hay que darle una chance a estas películas de perfil bajo, pero con mucho corazón que son una linda opción para ver en familia y pasarla bien, que no pase desapercibida en cartelera y te llevas algo, al menos una sonrisa y buena vibra.
